Remata el 2018 y arrancamos el 2019. El tiempo corre veloz, imperdonable y nos ha parecido muy adecuado rescatar esta cinta de Andrew Niccol para tenerla muy presente los próximos trescientossesentaycinco días que estrenamos.
La película es una distopía social en la que el tiempo se ha convertido en la única moneda de trueque. El mundo ha logrado el elixir de la eterna juventud y esto ha trastocado el concepto de capital pero no el del capitalismo darwiniano que lo sostiene y estructura. En esa sociedad futurista cruzan sus vidas el obrero Will (Justin Timberlake) y rica Sylvia (Amanda Seyfried) convirtiéndose, en una eterna huida hacia adelante y a contrarreloj, en unos modernos Bonnie y Clyde del futuro con vocación de Robin Hood, regalando días, minutos y segundos a la famélica legión.
Pese a la brillante y prometedora idea inicial, la construcción narrativa no consigue llevarla con vida hasta el final del metraje. La falta de un potente guión que conduzca por derroteros menos previsibles y superficiales lastra el pulso dramático entre persecuciones y acelerones. Pese a todo la cinta resulta entretenida y la idea es suficientemente valiosa y potente como para invitar a ulteriores reflexiones sobre nuestra vida y sus inversiones temporales: trabajo, ocio, valor, consumo, sentido, etc… El tiempo como moneda, como mercancía y como poder: el capitalismo del tiempo.
Feliz 2019 y recuerden tempus fugit!.
FICHA TÉCNICA
Título original: In Time
Dirección: Andrew Niccol
País: Estados Unidos.
Año: 2011
Duración: 109 minutos.
Género: Thriller futurista
Intérpretes: Justin Timberlake, Amanda Seyfried, Vincent Kartheiser, Cillian Murphy, Johnny Galecki...
TRAILER
No hay comentarios:
Publicar un comentario