viernes, 28 de febrero de 2014

"El lobo de Wall Street" o el desmadre a la americana.

Últimamente estoy que lo tiro. Con este son dos post en una misma semana. Esto suele pasar porque ha habido dos temas que me han llenado de motivación para darle el coñazo a mis lectores. El anterior artículo trataba sobre la gala de los premios Goya. Que por cierto, siempre acabo escuchando a alguien que se pregunta porque a un premio de cine se le llama como a un pintor. Pero los premios del cine británico se llaman Bafta y nadie dice nada...
Y este artículo viene motivado por la última película de Martin Scorsese que pude disfrutar en los Cines Zoco de Majadahonda. Antiguas salas Renoir, reabiertas gracias a la contribución de mas de 1300 socios. Todo un ejemplo. A Scorsese se le va la olla en tres horas de película que no pierde el ritmo salvo en los últimos minutos que ya dejó de correrme la sangre por las piernas y estuve a punto de echarme el refresco para poder reactivarlas. El problema podría venir que una vez acabada la pelicula, me levantaría con todo el pantalón mojado y viendo que esta película podría titularse "Sodoma y sin goma" pues no sería lo mas adecuado. Di Caprio realiza una muy buena interpretación con una evolución de un personaje tímido y poco integrado a otro mas diferente follador, drogadicto, vicioso y estafador. El actor Jonah Hill es su fiel escudero donde el dinero es la base de la estafa, el vicio desenfrenado, sexo, descontrol y todas las locuras que uno piensa que es increíble que haya podido ser verdad. El cineasta neoyorquino conoce y sabe mantener el ritmo. Pasando por escenas de fiestas espartanas y momentos que se mueven entre la comedia y el drama. Véase la escena de los "lemons" y sus consecuencias. Scorsese trabaja bajo un doble time line. Utiliza lo que muestra al espectador como lo que cree el personaje que ha sucedido y después te enseña la realidad tal y como ha sido. Bajo el efecto de las drogas y fuera de esos efectos. Viaje alucinógeno donde Di Caprio intenta ser De Niro y Jonah Hill su particular Joe Pesci.
Película muy recomendable para conocer alguna serie de excesos de ese capitalismo feroz, de la corrupción, la estafa y donde todo se vende y se compra. Hasta el alma y la dignidad. Viendo los momentos de crisis que ahora pasamos te puede llegar a indignar. 
Creo que si ves está película, "Margin Call" y "Los lunes al sol" todas seguidas y en ese orden, te dan ganas de salir a la calle y prenderle fuego al edificio de la Bolsa, las agencias de calificación y los grupos de banca de inversión. Así que por favor, hay películas que es mejor no mezclar. Algo así como juntar amoniaco con papel de aluminio.

lunes, 24 de febrero de 2014

Premios Goya. ¿Fiesta y/o protesta?

Como últimamente no encontraba tema estimulante, me acordé de la pasada gala de los Premios Goya del cine español. Bajo mi opinión como espectador fue bastante floja, con un realizador que se perdía los mejores momentos, con una actuación musical algo simpática pero para olvidar. Donde se escuchaban muy por encima las voces desafinadas de los actores que la música de fondo. Un presentador que buscaba el mismo tono de chiste que había en el Club de la Comedia pero que no llegaba a hacer gracia. En mi caso eché de menos a Eva Hache por su acidez a la hora de meterse con el personal. Posiblemente lo mejor de la gala fue premiar de una vez a David Trueba y a Javier Cámara después de tantas nominaciones y las locuras de los chicos de Hill Valley con Joaquín Reyes, Carlos Areces y Ernesto Sevilla entre otros. Aunque me faltó que mi admirado Antonio de la Torre se llevase su cabezón. Especial ilusión me hizo como cineasta alcarreño de adopción es el premio muy merecido a Pedro Solís por su magnífico corto de animación "Cuerdas". Y como otro ejemplo de humildad que cada año nos dan los premiados en la categoría de mejor película iberoamericana. El año pasado con la producción cubana de "Juan de los Muertos" y este año con el film venezolano "Azul y no tan rosa". Donde sendos premiados demostraron una capacidad de ilusión, entusiasmo y humildad que muchos quisiéramos por estas tierras.

Con el mosqueo del sector del cine y la pitada al MinistroWert en los premios Forqué, se veía venir una oleada de indignación. Sobre todo ante la anunciada ausencia de última hora del Ministro de Cultura. También las diferentes intervenciones de algunas actrices en contra de la ley del aborto tuvieron lugar en algunos momentos de la gala. Desde mi punto de vista, estoy totalmente de acuerdo con que la gente proteste donde le de la gana de manera pacífica. Pero también creo que no sé hasta que punto una gala de cine donde se supone que los compañeros de profesión van a una fiesta para reconocer y dar proyección a nuestro cine, no es contraproducente que el espectador acabe hablando mas de las protestas o la ausencia del político de turno que de lo realmente importante. La fiesta, los nominados y los premiados. Como bien dijo David Trueba y de manera muy certera, aquí somos una familia y como cada familia hay gente de todos los signos políticos. Cuidado, repito que cada persona es libre de hacer su protesta. Yo me centro en si esa protesta al final vaya a la contra y el espectador esté cansado y cada año en la entrega de premios alguien diga "ya están estos actores que protestan por todo y están hartos de marisco". Una visión muy generalizada desde ese espectro de la sociedad española que no entienden que los trabajadores del cine son como otros cualquiera. Que no llegan a fin de mes. Que están en el paro largas temporadas. Y entonces tendrás otro cacique que dirá..."pues que se busquen un trabajo de verdad..." ¿Un trabajo de verdad? Entonces me haré Ministro...


lunes, 6 de enero de 2014

"La Caza" y aquel legendario lugar llamado Videoclub.

Ya hace unos cuantos meses que no escribía acerca de algún titulo cinematográfico. Estoy perdiendo las buenas costumbres. Pero la rutina diaria me desplaza hacia otros mundos no tan creativos pero necesarios para pagar facturas.
 En este caso realizo la apertura del año, no con un estreno en salas sino con la publicación hace ya unos meses en DVD de uno, a mi juicio y al del dependiente del videoclub que suelo visitar, de los mejores films del 2012. Si, habeis leido bien. Yo sigo yendo al videoclub. Ese local lleno de películas que uno se alquila por un tiempo y entre unas cosas y otras se da un paseo y baja la barriga cervecera. Si. Ese tipo de locales siguen existiendo. Donde tienen un olor particular. Mezcla del plástico de las cajas y chucherías. Os invito a buscar uno de esos legendarios locales y de paso generamos riqueza en nuestro barrio.

Volviendo a lo que nos atañe, hoy hablamos de "La Caza" de Thomas Vinterberg. Cine post Dogma95. Producido por Lars Von Trier e interpretado de manera magistral y contenida por el actor Mads Mikkelsen. Interpretación que le supuso ser galardonado al mejor actor en el Festival de Cine de Cannes del 2012. El realizador danés teje una historia terrible dentro de un mundo rutinario donde un profesor de una escuela infantil es acusado de abusos sexuales a una de sus alumnas. Hasta el momento, el planteamiento  podría ser la premisa de cualquier telefilm de sobremesa con el cartel de "basado en hechos reales". Lo que hace diferente al film de Thomas Vinterberg es la capacidad de crear ese ambiente continuo de tensión. De hipocresía. De moralidad impostada y de acoso y derribo de un miembro mas de una comunidad muy obtusa. 
Donde el final de la película deja un mensaje abierto a la interpretación del espectador o incluso a dejar entrever que la sociedad perdona pero no olvida. Y que la mentira de una niña puede dar lugar a arrebatar para siempre el derecho al olvido de cualquier persona que siempre será señalada por algo que sale de la ficción de una mente que prácticamente no distingue el bien y el mal. Y una sociedad hipócrita y manipuladora que escupe a la cara antes de saber toda la verdad. O al menos contrastarlo.
Película dura. A veces demasiado. Pero que merece la pena. Tanto por la interpretación de todos sus actores como la dirección que hace el realizador danés.